sábado, 9 de octubre de 2010

TRIBUTO A MICHAEL JACKSON

Solo en este lugar del mundo tan especial podia ocurrir esto, homenaje a un maestro de la musica realizado por unos maestros de la corneta.









http://www.youtube.com/watch?v=66iIKkuVoc0

miércoles, 6 de octubre de 2010

TANDA 14


Llevaba ya varios años sin portar a la Patrona el ultimo domingo de Septiembre, pero este año me apetecia. Tras varios años que me resultaba un poco ridiculo el espectaculo de filas de Horquilleros charlando y paseando sus pajaritas y hablando de todo menos de Ella. En fin, pero bien vale el rato por sentir esas andas que aunque puñeteras para lo poco que se cogen, son gratificantes por el hecho en si de sentirla tan cerca. Todo esto de sentir a una Imagen se me antoja muy materialista, pero el hombre, a la postre necesita siempre de agarrarse a algo, tangible o no, pero a algo.En este caso, en mi caso, desde que el vecino de mi madre cuando viviamos en la Calle Nueva de la Virgen, Pepe Arcos, me apadrinó como horquillero allá por los finales de los ochenta, no he dejado de quererla. Es distinta a las demás, aunque sean la misma. Pues eso, que este año, me apetecia de nuevo y tenia mucho que contarle y pedirle, por los mios y por mi mismo, y Ella parece que me hizo un pequeño regalillo, el de poder meterla en su Basilica. La tanda 14 se encargaba de recogerla, desde la Fuente de las Granadas, la llevamos entre palmas y un silencio un tanto peculiar solo roto por algunos vivas a Ella. Portaba el varal 36, en la trasera de las andas, sobre terciopelo burdeos mi hombro se apretaba contra sobre el numero 36 bordado en oro, y al terminar la revirá, ya bajo el palio encima para protegerla de las palmas reales,me quedé al volverme de cara a la Basilica que estaba completamente vacia, como es costumbre Ella entra primero. La chicota mas intima que he vivido, solo para los 38 Horquilleros, el camino hacia su lugar al lado izquierdo del Altar, se hizo eterno, por el privilegio, y por el peso, porque no decirlo. Un momento inolvidable, el amigo Sebas Gamez me veía desde el púlpito, posteriormente entraron todos los HOrquilleros y se rezó antes de que de nuevo fuese del pueblo. Para un año tan duro, me supo a bálsamo aquel momento.